Hoy ha sido una sorpresa encontrarme esta instantanea, es de uno de mis días de mercado con la Julyeta y la Carmela, al llegar bien tempranito lo primero que hago es mirar hacia ella, la torre de nuestra iglesia, mil veces fotografiada por mi Sonyeta, aunque esta vez la hice con el viejo móvil que actualmente tengo, viejo pero cada vez mas valiente, ha pasado ya por 100 manos y aqui esta resistiendo golpes y caídas y casi diciéndome, no me cambies, como yo no lo vas a encontrar, jajajaja.
Para ilustrar musicalmente esta imagen de niebla, he buscado en la red y me salio esta preciosa canción, simplemente hermosa, hermosa canción, hermosa letra, para recordar a los que nos dejaron y que tanto amamos y amábamos.
Sólita en un
rincón,
de un tiempo
que murió,
hace algún
tiempo atrás,
sin horas ni
reloj.
Ausente en
ese vals
de cínico
compás,
bailando en
un montón
de niebla y
soledad.
Y yo no sé,
no sé como
llegar,
y solo sé,
tan solo sé
cantar
y agradecer
que puedo
recordar
tus
caricias,
piel de sol
y terciopelo.
Perdida
entre tu piel
se ríe tu
niñez,
se ríe y vos
te vas;
te abrazo
donde estés.
Y yo no sé,
no sé como
llegar,
y solo sé,
tan solo sé
cantar
y agradecer
que pude
disfrutar
de tus mimos
de budín
y caramelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario