Hoy la imagen corresponde al burro que sacamos el Domingo de Ramos en procesión, lleva sobre sus lomos a Jesús, entrando triunfante en Jerusalen.
Hoy le quiero dedicar una entrada, personalmente siempre que lo veo me alegra la vista, y pienso que es un animal menospreciado por nosotros.
La verdad es una lástima que no se ahonde más en el tema de
los burros y sólo se les vea como unos tontos animales. Sin ofender a los
burros por la torpeza de algunos hombres, cuyas profesiones pueden ir de
médicos a carpinteros o albañiles, de abogados a arquitectos, de locutores a
conductores de televisión, de
gobernantes a políticos o politiquillos que pueden llegar a ser alcaldes, diputados,
gobernadores, senadores, secretarios de gobierno, ministros o incluso presidentes.
Para acompañar la entrada, nada mejor que esta moraleja o cuentecillo para aplicarla sobre nuestra vida, muchas veces debemos aplicar a la fuerza la inteligencia para que juegue a nuestro favor en las circunstancias adversas.
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